Empleo en México

Nueve millones de jóvenes mexicanos de 12 a 29 años no estudian, ni trabajan, es decir “no se dedican a nada” lo que resulta un dato desalentador porque “en este segmento poblacional existe un promedio de 9 años de escolaridad”, el cual es mayor a la media nacional que alcanza el 7.1, aseguró José Antonio Pérez Islas, coordinador de la Encuesta Nacional de Juventud 2005. Este tipo de jóvenes, que representan 22 por ciento del este segmento poblacional, está compuesto fundamentalmente por mujeres de entre 20 y 29 años. Realizada por el Instituto Mexicano de la Juventud (IMJ), el estudio también resalta que los jóvenes, en comparación con un análisis similar en 2000, empiezan a retrasar las decisiones que determinan sus vidas. “Hace cinco años acciones como abandonar la escuela, conseguir su primer empleo, tener hijos y/o dejar su casa se daban entre los 14 y 17 años, ahora tales determinaciones empiezan entre los 16 y 21, es decir hay un retraso de 2 años en promedio”. Sin embargo, las principales expectativas de este grupo continúan siendo las mismas y están ligadas: en primer lugar a tener un trabajo (cuatro de cada 10) y vinculado con ello tener una buena posición económica. En tercer lugar está el tener familia e hijos, que en el caso de las mujeres tienen un porcentaje más alto. La posibilidad de estudiar es la sexta expectativa. Educación La encuesta coincide con los estudios realizados por el Centro Nacional de Evaluación para la Educación Superior (Ceneval), en que la edad crucial para este grupo, en lo que respecta a la deserción escolar es entre los 15 y 17 años. En el nivel básico, primaria y secundaria, es completado en mayor medida por las mujeres, sin embargo, los siguientes niveles: medio superior y/o superior, tiene datos más elevados en los hombres, especialmente la preparatoria y la universidad completa. Un dato preocupante de tal deserción se encuentra en los motivos por los cuales dejaron las aulas, las respuestas con más alto porcentaje fueron “porque tenía que trabajar” y “ya no me gustaba estudiar”. Análisis propio. Sobre la visión que tienen los jóvenes de sí mismos, es decir, cuáles son los problemas que como grupo enfrentan son los siguientes: las drogas y el alcohol (70.8 por ciento) es la principal preocupación seguidas de la falta de trabajo (28.3 por ciento), los problemas del país en general (17.5 por ciento), la violencia (15.7 por ciento) y las escasas oportunidades para estudiar (14.5 por ciento). Pero a pesar que la falta de empleo no es la principal preocupación, 16.8 por ciento de los jóvenes ha pensado en migrar a Estados Unidos y son principalmente hombres quienes a partir de los 15 años piensan en esta posibilidad. La investigación fue realizada a 12 mil 815 jóvenes de entre 12 y 29 años divididos en tres esferas: urbanos, semirubanos y rurales. La realización del diseño muestral y la estrategia de aplicación y validación de resultados estuvo a cargo del área de Investigación aplicada y opinión del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. No confían en policías y políticos Dentro del estudio, los jóvenes también pudieron calificar la credibilidad en ciertas personas e instituciones. En ese rubro la policía con un promedio de 5.9, los partidos políticos y los diputados federales con 6 y los sindicatos con 6.5 son las instituciones en que menos confían los mexicanos. Pero la política mexicana no sólo cuenta con ese “desprecio” por parte de este grupo. Al cuestionarles las razones por su desinterés en la política las dos respuesta más constantes fueron: “no me interesa” y “porque los políticos no son honestos”. Además sólo un 39 por ciento asegura que participa en la política “cuando existen elecciones”. Pero el desinterés va más allá, 42 por ciento de los muchachos entrevistados mencionaron que casi nunca acostumbran leer o escuchar noticias sobre asuntos políticos Es decir, es un mundo completamente ajeno a ellos. En lo que refiere a instituciones con tradición democrática y autónoma como el IFE y la Comisión Nacional de Derechos Humanos tienen niveles intermedios de 7.3 y 7.6 respectivamente. Un panorama poco alentador en tiempos electorales, y más aún, por ser este sector uno de los más amplios y convocados para su participación en la próxima elección federal.

Crónica (México)